jueves, 28 de enero de 2010

Antes No Era Tan Borde.

Es una casa de tres pisos,
pero no una casa normal,
es toda de cristal.
Todas las paredes y tabiques transparentes
y solo hay puertas,
puertas negras,
como el color de sus pupilas.
Al principio estoy encerrado arriba del todo
y veo las rápidas sombras pasar por debajo de mi.
Entonces pruebo con todas las puertas,
no abre ninguna.
Empiezo a darme cabezazos contra los muros.
Esa es la primera metáfora
idéntico a mi situación actual.
Cuando consigo partir el cristal
salgo de la sala y bajo por las escaleras,
pero se rompen, el cristal es frágil.
Se va rompiendo bajo mis pies.
Ahí esta
la segunda metáfora.
Cuando por fin me encuentro en el segundo piso te veo,
sentada contra una puerta,
con todo el flequillo tapándote la cara.
Haciendo ruidos,
como si estuvieras llorando.
Ahí hay una parte que recuerdo muy bien...
Solo sé que miré hacia abajo.
No se que pude ver,
pero lo siguiente que hice fue romper la puerta.
Entro en la habitación donde tu estas
te doy mi mano
y empiezas a gritar.
"No me toques"
"No mereces tocarme"
"No tienes derecho"
Largate!, prefiero morir aquí antes que irme contigo"



Bajo,
salgo por la puerta
y te veo abajo, de nuevo, en la calle.
Sales corriendo
entras en un portal
te sigo,
te giras,
me miras,
a los ojos,
donde más duele.
Te acercas,
bajas la mirada,
me miras a los labios.
Te acercas aún más,
sonríes,
a la vez que tus labios se acercan a los mios.
Siento un utensilio afilado cerca de mi estomago,
un golpe,
se acaba el sueño.

1 comentario:

  1. escucha The Wall de Pink Floyd

    ah, y recuerda que ahí y hay no es lo mismo

    ResponderEliminar